DECLARACION DE LOS HERMANOS DE AGUSTIN BEJARANO CABALLERO
Agustín Bejarano se ha crecido mucho más luego de la controvertida decisión de la justicia ejercida por
el Tribunal Penal del Condado de Miami- Dade, sus resentidos acusadores, han quedado al descubierto
tras esta decisión, pues sus verdaderos deseos eran enterrar en vida al famoso y reconocido artista
objeto de su malevolencia, que nunca se declaró culpable del delito principal por el cual esta
frustrada fauna, “aplatanada” en su añorada Miami, le acusó injustamente. Para el excelentísimo
Juez, los representantes de la fiscalía y para la inmensa mayoría de los cubanos de allá y de acá,
nuestro hermano Agustín fue siempre y es inocente, víctima de su propia ingenuidad y creyente de
que la parentela allegada por vía de su esposa era de otra catadura, y su sanción ha sido producto,
reafirmando las palabras emitidas por Aziyadé, esposa de Agustín en su carta dirigida a familiares y
amigos el pasado 2 de noviembre. -“a la trampa bien orquestada” en la que desgraciadamente fue
envuelto y a los tecnicismos del código de justicia vigentes por los que se rige la justicia de esa nación.
En estos largos meses en que Agustín, a partir de elementos muy poco consistentes fue encarcelado,
negándosele la posibilidad de ser procesado bajo fianza, fue fusilado por sus detractores, por la prensa
de todo tipo y demás medios de comunicación, pocas veces una personalidad del arte con residencia
en la Isla y no allá, fue tan machacada, ultrajada y agredida tan salvajemente como a nuestro querido
hermano, sólo con el apoyo de su fiel esposa y de centenares de amigos radicados en los EEUU,
en Cuba y otras latitudes que nunca creyeron ni creen en las patrañas con que fue organizada y
repetimos bien claro, organizada de antemano con diferentes fines que se reflejan en los siempre
ofensivos comentarios, anónimos en su mayoría y otros bajo seudónimos de origen dudoso, que
se publicaron en el Blog “creado por los acusadores”; pudo Agustín y su compañera Aziyadé hacer
frente y resistir durante los últimos 19 meses de prisión, prácticamente sin recursos y bajo extrema
presión. El movimiento generado en defensa y apoyo que reúne a cientos de personas, profesionales
y no profesionales del arte, algunas de ellas, no le conocían, pero al tener dominio de los hechos, el
entorno en que se desarrollaron y la calaña de quienes los compulsaban dieron su apoyo solidario y
de todo tipo; citando a Martí, podemos aplicar a esta actitud “Los hombres van en dos bandos, los
que aman y fundan, los que odian y deshacen”, por suerte para el mundo los primeros somos más,
los segundos nunca serán recordados. El nombre de cada uno de los centenares de amigos, colegas,
compañeros conocidos o no, que nos acompañan en esta difícil cruzada en defensa de la inocencia del
Beja, quedará grabado para siempre en la historia como símbolo de la amistad, del compañerismo, de
la solidaridad que une a los hombres ante la injusticia, mientras que sus acusadores caerán en el olvido
y sus pecados no serán quizás sancionados por las leyes pero si más temprano que tarde por la justicia
divina, más eficaz y justa que la de los hombres, alejada del laberinto técnico judicial y de perjudiciales
influencias.
Los medios, con su lenguaje sensacionalistas, recrean el paladar de la canalla instigadora del infundio y
agregan más leña al fuego inquisidor cuando difunden que Agustín se declaró culpable, pero no
especifican de qué se declara culpable y bajo qué circunstancias, aspectos que queda bien definidos en
fin; y para aumentar el tono terrorífico de la sanción impuesta, añaden, “Además, será declarado
depredador sexual y colocado en las listas informativas del condado Miami-Dade sobre este delito. No
podrá tampoco mantener contacto con la familia del menor”. Todos nos preguntamos, ¿Dónde están
las evidencias para calificarlo de esa manera? Como se ha demostrado durante el proceso nuestro
hermano no tiene delito de ningún tipo, en su país ni en ningún otro, por lo que consideramos injusto y
abusivo lo que se está afirmando y divulgando sin fundamento conocido ni elementos de juicio
suficiente que permita a la opinión pública tener una percepción real y exacta de su persona y de la
situación por la cual se le juzga. En cuanto a la prohibición de mantener contactos con la familia del
menor, ¡Libre Dios!, a estas alturas hay decenas de cientos de personas dentro y fuera del país que
evitarían por todos los medios relacionarse seriamente con tamaños pillos y sus acólitos, nadie, luego
de esta amarga y bochornosa experiencia, tendría la ingenuidad de mantener ningún tipo de relación
seria con esta familia, quizás los vecinos, si es que aún los tienen y por obligada necesidad porque
popularmente se conoce aquello que dice-“Dime con quien andas y te diré como eres”. Durante estos
últimos meses estas personas y sus compinches invitados al festín de la infamia, idearon las mentiras
más descabelladas con el fin de desacreditar la imagen de Agustín, ofendieron la moral de familiares,
amigos y a todas las personas que defienden la inocencia del Beja, divulgaron falsas evidencias para
tratar de influir de algún modo en la percepción de los representantes de la justicia y en la opinión de
todo el que les prestara atención y desanimar a familiares y amigos, mintieron descaradamente con la
ocurrencia de hechos nacidos de sus torcidas mentalidades, vertieron en los comentarios divulgados en
su Blog toneladas de su ideología, pretendiendo dar un matiz político al caso, con énfasis en el
intercambio cultural entre ambas naciones, intento condenado al fracaso desde un inicio por las
características del mismo, lo que indica además su falta de cordura, en fin, pusieron en juego todas las
artes manipuladoras de manera irrespetuosa y grosera evidenciando la ruin calaña de sus
personalidades y la ausencia total de valores humanos y respeto. Para los que aún puedan dudar de
nuestros argumentos, les sugerimos revisar los cientos de comentarios que escribieron o permitieron
en su malévolo Blog “Bejarano el Juicio”, en su casi totalidad, el contenido de los mismos viola el
artículo 12 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que plantea literalmente “Nadie será
objeto de injerencias arbitrarias en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia, ni
de ataques a su honra o a su reputación. Toda persona tiene derecho a la protección de la ley contra
tales injerencias o ataques”, sobran los comentarios al respecto.
“Confiamos en que la justicia norteamericana será lo suficientemente capaz de discernir la verdad
de la mentira en que han envuelto toda la injusta acusación”, con esta frase terminó la última
declaración que hicimos como hermanos de Agustín, y cierto, la justicia de ese Estado, fue capaz
de percatarse de la gran injusticia que se cometería si el caso fuese llevado a corte y decidido por
un jurado que independientemente de que se contaba por la defensa, con todos los elementos
necesarios “para ganarles el caso, ese no sería el verdadero final “como declaró su abogado, pues los
tecnicismos de la justicia habrían provocado un sanción mayor y por tanto injusta totalmente tal como
refiere y se explica en la carta de su esposa Aziyadé más detalladamente este aspecto y se enfatiza “en
que lo único que aceptó Agustín Bejarano en el Acuerdo (en la vista) es que el menor pudo haberlo
visto orinar accidentalmente en el baño, nunca se declaró culpable de haber tocado a un menor y
menos de haber abusado”.
Desde nuestra primera declaración el 15 de abril del pasado año planteamos “Los que conocemos
a profundidad a Bejarano, estamos convencidos desde un inicio que por sus valores morales,
adquiridos en el seno de una familia de personas honestas, trabajadoras, cuyos padres supieron con
su ejemplo y sus enseñanzas darnos la educación y cultivar en sus cuatro hijos, del cual Agustín es
el más chico, sentimientos que se contraponen a todo lo que se le ha querido imputar, los hechos
por los que se le acusa injustamente no se corresponden con las cualidades de nuestro hermano, de
las cuales, se han ocupado de hablar sus amigos, que viven allí, acá y en otras partes del mundo .
Nosotros sus hermanos de sangre, que le conocemos como nadie, podemos afirmar a todos que ese
que acusan, NO ES NUESTRO HERMANO, porque él no es capaz de tamaña atrocidad”.
Hoy reafirmamos este planteamiento y estamos mucho más convencidos de que los verdaderos
facinerosos fueron los que fabricaron el delito del intento de abuso sexual a un menor en persecución
de una venganza de la cual Agustín fue el “chivo expiatorio” y es oportuno recordar otro excelente
aforismo martiano que se ajusta perfectamente a la situación de nuestro hermano “Todo hombre nace
rey, la labor está en hallar en sí los útiles con que se hace el trono” Agustín desde una prisión, acusado
por algo que no hizo, sin derecho a fianza, maltratado por las mentiras de un grupo defraudado y
rencoroso que apoyados por una prensa sensacionalista y aprovechando los tortuosos laberintos del
código penal, han lograron mantenerlo encerrado; posee como útiles, los valores morales con que
su educación familiar y social le pertrecharon para la vida y que le hacen superior pues posee más
dignidad, humanismo, honradez, honestidad y valentía que sus difamadores. Algún día saldrán a la luz
las verdaderas causas que motivaron esta falsa y bien pensada acusación pues como dice el refranero
popular, “Por mucho que la mentira corra, la verdad siempre la alcanza”.
Mientras los acusadores y sus compinches dedicaban su tiempo inútilmente en desacreditar su
imagen como persona y como artista con el ya conocido estilo goebbeliano de repetir las mentiras
una y otra vez hasta lo infinito, con el objetivo de que sean aceptadas como verdad; nuestro hermano,
encerrado en un recinto correccional, sin derecho a fianza, sin posibilidad de tener contacto con sus
familiares más cercanos, necesitado de atención médica especializada por sus problemas de salud,
sin poder tener acceso a ningún tipo de literatura de carácter social y sólo contando con las pocas
visitas permitidas a su esposa y de algunos fieles amigos con un doble cristal de por medio, esposado
y vistiendo las ropas de recluso no se dio por vencido, a la par que inició la preparación de la defensa
de su inocencia, no detuvo su creación artística y con los limitadísimos recursos a su alcance, y la
laboriosidad e ingenio que le caracterizan, fue capaz de dar continuidad a su arte y todos pudimos
disfrutar con sorprendida admiración sus obras artísticas, en exposiciones desarrolladas en la XI Bienal
de La Habana así como de la muestra colectiva “La Patrona del Sol” celebrada en Miami con motivo
del 400 aniversario del hallazgo de la Virgen de La Caridad del Cobre, por sólo citar dos importantes
eventos en este período de prisión fecunda donde no ha dejado de producir sus obras. Esto nos
demuestra a todos; su firmeza de espíritu, su confianza de que la verdad se abriría paso por entre la
madeja de infundíos canallescos, de la envidia, del rencor, de los intereses vengativos, de quienes
deseaban saciar en su persona las bajezas de su desnaturalizada condición humana, por lo que su arte
se convirtió en coraza protectora, en espada defensiva ante este escenario de limitaciones obligadas.
No pudieron concretar sus ruines aspiraciones los truhanes acusadores; el hombre no fue destruido, se
creció y el artista engrandeció su imagen, demostró su valor en condiciones adversas, rebasó los muros
y rejas de la prisión para proyectarse con sus valores humanos y artísticos al mundo.
Nosotros, sus hermanos y demás familiares, todos en general, continuaremos defendiendo su
inocencia porque como afirmara en su momento nuestro héroe nacional “Mientras que la justicia no
esté conseguida, se pelea" y con paciente impaciencia continuaremos esperando el pronto regreso del
Beja a la patria, a su pueblo, a sus amigos y colegas de profesión, a sus vecinos de la cuadra, al seno
familiar, donde se le admira, quiere, y apoya íntegramente.
Reiteramos una vez más nuestro sincero y eterno agradecimiento a todas las personas que apoyan
y defienden en Cuba y fuera de ella la inocencia de Agustín Bejarano, la persecución de un mismo
objetivo nos hermana como subir montañas, han sobrepasado la categoría de fieles amigos, esta lucha
los ha convertido en hermanos de Agustín y de nosotros.
Agradecer además a los prestigiosos defensores, Melvin Black, René Sotorrio y demás colaboradores
del equipo que trabajó en su defensa, el interés tomado en el caso y todos los esfuerzos desplegados
en función de la solución del mismo.
Hermanos de Agustín,
Miguel, Alejandro y Mario Bejarano Caballero.
" Desgraciado serán aquellos que hacen lloran a Dios ". JM